El día miércoles 10 de julio del 2013 he presentado con el carácter de indeclinable, mi renuncia como entrenador y director del departamento de básquetbol del club GEPU de San Luís.-
El motivo principal de mi renuncia es que luego de los éxitos deportivos, advertí claramente una seria incompatibilidad entre las formas de pensar, decir y actuar por parte de los dirigentes más representativos del club (a los cuales respeto personalmente, pero no comparto) para con mis ideales con los 20 años de profesión que llevo viviendo para este mi amado deporte.-
Soy de las personas que cree que hay respetar los tiempos que lleva desarrollar un proyecto, en las funciones de los equipos de trabajo (los deberes y responsabilidades de jugadores, dirigentes, entrenadores, padres, colaboradores, etc.) y para ello, me he especializado.-
Creo en la “palabra” y el “respeto” entre las personas con las que me toca trabajar (jamás firme un contrato en los clubes que trabaje) cuando esto se pierde no le encuentro sentido continuar.
Pienso que el club debe tener una política deportiva definida o trabajar en su construcción, Llevar a cabo el plan que se quiere desarrollar y hacer respetar lo que se quiere hacer (El gran problema de la mayoría de los clubes a mi entender es que no cuentan con planificaciones al respecto de objetivos que se quieren lograr).- La mayoría queda supeditado a el entusiasmo de un entrenador, profesor o dirigente de turno que es lo que tienen ganas de hacer. En tal circunstancias, se produce una puja de poder, que daña cualquier finalidad deportiva e institucional.
En mi opinión los mejores clubes deportivos, y de básquet en particular disponen de organigramas más cuidados y más eficientes a nivel local, provincial, nacional y si requiere expectativas internacionales.-
. Lejanos están los tiempos en los cuales un presidente, tomaba el protagonismo y todas las decisiones. No pretendo criticar esta figura, ya que sin su esfuerzo, amor al club e ilusión, muchos clubes de nuestro deporte no hubieran salido adelante años atrás.
Hoy en día existen muchos cursos de capacitación para dirigentes deportivos. Cargos como los de gerente deportivo o director general han nacido con la idea de colocar personas preparadas en puestos específicos.
Soy un convencido, por conocer varios lugares, de que no en todas las provincias las instituciones tienen la suerte de tener como aquí, en San Luis el apoyo económico y estratégico desde el gobierno para poder encarar competencias importantes a nivel nacional, e internacional. Esto que es muy importante debe alentar a los dirigentes para ocuparse más de capacitación dirigencial, humildad, gestión y sacrificio a la hora de trabajar, seguro los resultados serían más que beneficiosos.
Quiero agradecer a todos los jugadores por la dedicación, y contracción al trabajo y el respeto que me brindaron como así también a los padres que confiaron en mi tarea, también a los profesores Diego y Claudio, pero especialmente al profesor Alejandro que apostó a este proyecto y dejo todo en Cba para venir a trabajar a esta Provincia, también quiero agradecer al doctor Alejandro Martorina y no quiero olvidarme de los dirigentes y colaboradores que en su momento si confiaron en el proyecto.
No es mi intención herir ni hacer sentir mal a nadie simplemente ser lo más sincero posible con lo que siento y lo que me llevo a tomar esta decisión, sé que tuve la suerte de trabajar en un histórico club lo cual nunca voy a olvidar y en el cual me hubiese encantado continuar desarrollando el proyecto como entrenador, asistente, coordinador o director deportivo, pero por encima de todo esto están mis principios y valores que no estoy dispuesto a negociar.
Gracias GEPU.
Pablo Daniel
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